Los comerciantes del malecón de Playas de Tijuana viven en incertidumbre ante la paralización de las obras de rehabilitación de la zona, detenidas desde septiembre de 2024 sin fecha definida para su conclusión. Con Semana Santa y el verano a la vuelta de la esquina —temporadas clave para el turismo local—, los dueños de negocios advierten que el retraso podría profundizar las pérdidas económicas que ya superan el 50% e incluso alcanzan el 80% en algunos casos.

Además de la caída en ingresos, los comerciantes denuncian que no han recibido apoyos ni descuentos en los trámites obligatorios para operar, pese a las dificultades generadas por las obras. «Nos sentimos ignorados. Sin el malecón listo para la temporada alta, el golpe será irreversible», advirtió otro empresario.

Mientras el reloj corre en contra de la economía local, la pregunta que resuena entre los negocios es: ¿llegarán las autoridades a tiempo para rescatar la temporada turística o el malecón seguirá siendo un símbolo de abandono?